La start up española de ingeniería RiveKids Technology que hoy cumple 3 años, ha conseguido en solo 18 meses poner una tecnología en el mercado con novedad mundial. RiveMove, la primera tecnología de RiveKids es un accesorio compatible con las sillas de coche con ISOFIX. Esta tecnología consigue mejorar la seguridad de las sillas de coche hasta en un 20%. Además de fabricar y comercializar su propia tecnología, RiveKids realiza numerosas acciones formativas para mejorar la Seguridad Vial
RiveKids Technology es una start up que comenzó su andadura en 2015. Desde el principio su objetivo ha estado siempre claro: mejorar la Seguridad de los niños en el coche. Para ello, esta ingeniería de Valladolid ha seguido varios caminos, el principal ha sido desarrollar una tecnología, RiveMove, que permite mejorar hasta un 20 % la seguridad de las sillas de coche. Además, con este dispositivo se consigue desplazar hasta 14 centímetros las sillas de coche, recuperando las 3 plazas traseras de cualquier vehículo.
Todo comenzó con una necesidad personal del fundador José Lagunar y ha terminado por ser una solución al alcance de todos y presente en miles de familias de más de 9 países. RiveKids cuenta con tres patentes internacionales que protegen esta tecnología que se ha desarrollado y se fabrica íntegramente en la provincia de Valladolid.
Además del gran hito de conseguir la implementación de un producto de seguridad en un período tan corto de tiempo, RiveKids ha sido reconocida con diferentes premios a lo largo de estos 3 años de vida. El Ministerio de Economía, Industria y Competitividad les ha concedido el sello PYME innovadora, han sido finalistas del premio emprendedores y seguridad vial de Línea Directa o nombrados Start Up Industrial más destacada por el Colegio de Ingenieros de Valladolid.
RiveKids está convencida de que la educación es un aspecto clave para cumplir su objetivo, mejorar la seguridad infantil en el coche. Es por ello por lo que paralelamente a su actividad principal organizan y participan en diferentes eventos, ferias y jornadas. La atracción principal de sus actividades es lo que ellos llaman el “RiveCar” un coche partido por la mitad que deja visible los asientos traseros y que utilizan para mostrar mediante juegos, la importancia del correcto uso de los elementos de seguridad del vehículo, especialmente los relacionados con la seguridad infantil.
La mayoría de start ups no llegan a cumplir su tercer año, y quizá parte del éxito de RiveKids resida en su equipo. Desde la fundación de la compañía se han juntado perfiles multidisciplinares con mucha experiencia en gestión, finanzas y sobre todo Seguridad Pasiva en Automoción. Juntos y con el objetivo común y claro de mejorar la seguridad han sido capaces de transformar una idea en tecnología y lo que es más complicado, en un producto al alcance de la mayoría de las familias europeas. No ha sido fácil. Su investigación sigue consumiendo absolutamente todos los recursos de la compañía, porque son fieles convencidos de que solo con investigación se pueden dar saltos tecnológicos en la mejora de la seguridad.